lunes, 27 de septiembre de 2010

Cuentos


Un afamado psiquistra infantil recomienda algo que nuestros padres y abuelos hacían muy bien: contar un cuento al niño antes de dormir. Un cuento es una actividad relajante y, al mismo tiempo, una acto de comunicación; el niño te mira y te escucha. Una consola es buena en cuanto a la actividad que supone, pero es totalmente incomunicativa. Además, si a un niño le acostumbras a escuchar un cuento cada noche, puede que sea lector cuando sea adulto.

Eso, eso. C O M U N I C A R. Dar que hablar, plantear conflictos, hablar de miedos, de valores, pensar, emocionarse, reír, asustarse, enamorar, descubrir, elucubrar, imaginar... vivir. Contar nos hace vivir y esforzarnos por entender el mundo en el que vivimos.

Contemos, escuchemos, gocemos.

Hoy reseño uno llamado `Un gran sueño´, ¿Que pasa si eres un "pequeño", que pasa si tienes un sueño, un gran sueño?

Mediante frases cortas pero de hondura cada una de ellas, el autor nos pone en el personaje, nos hace ser parte, nos hace sentir que a veces, al igual que al protagonista, nos aparecen obstáculos, nos ignoran, intentamos, buscamos y finalmente a veces hasta hallamos.
Comerse el mundo no es fácil, da esfuerzo y mucho trabajo, pero vale la pena.

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