martes, 16 de noviembre de 2010

Leer






He terminado dos libros en apenas dos semanas. Creo que empiezo a recuperar mi estado de asidua lectora. Aunque mi record de época universitaria todavía no creo que logre alcanzarlo. Tres niños, ser madre, profesional y con continuas actividades que demandan bastante... hacen que el tiempo libre sea un bien preciado.
Aún así, empiezo a disfrutar de esos tiempos para una.
El trotar por la playa, hacer ejercicios y respirar el aire salino del amanecer siempre ha sido una gran inyección de energía. Se acerca el verano y con eso las temperaturas se vuelven más agradables, por lo tanto la luz cambia y el paisaje se transforma de forma amigable para recorrerlo temprano.
Quizás algo pendiente es el sumergirme en un baño de tina. Hace años que no me hago el espacio para relajarme en agua caliente, lleno de espuma, con velitas encendidas a media luz para darle un toque más místico. Escuchar música y dejar que el cuerpo y la mente se expanda.
Una delicia.

Ahora... está atardeciendo y me escapo por unas horitas a mi clase de Tango...

Cariños!

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