viernes, 21 de enero de 2011

The gift



Hace unas horas llegó una email de una amiga que hablaba sobre la importancia de estar "presente", de la amistad, de la real. Las relaciones las vamos construyendo y cada uno es responsable de cómo las cultiva. Algunas permanecen en el tiempo, se hacen fuertes y nos regalan verdaderos frutos jugosos y exquisitos. Otras son pasajeras y nos quedan los buenos recuerdos. Otras se marchitan y no prosperan, como las semillas que no llegan a caer en tierra fértil. Hay otras ingratas que parten dejando penas . Y otras reaparecen después de largos años de silencio.
A veces es difícil constatar que quienes creímos eran amigas, no lo son. Y a veces nos sorprenden las personas en las que menos esperábamos una respuesta.
Sea de cualquier forma, la amistad no son sólo momentos medidos en tiempo o calidad. Es realmente un regalo desinteresado, en el que entregamos lo mejor de nosotros a alguien. No se puede imponer, ni obligar. Quién lo recibe, tendrá la fortuna de tener lo mejor de uno, lo mismo que cuando nos llega un presente de estos, sabremos valorarlo en su real dimensión.
Quizás por ser algo tan preciado es escazo... y por lo mismo se dice, que los verdaderos amigos.. esos se cuentan con los dedos de una mano.
Buenos días!

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