lunes, 16 de mayo de 2011

Trigo y amapolas





No me importa cuando llueve...en Primavera, con tormentas, y dan paso a un sol resplandeciente. Luego sales a pasear y todo está florido a tu alrededor, y te encuentras mariposas blancas aquí y allá. Me encanta la primavera, la estación que escogió Botticelli para el nacimiento de Venus. En primavera la vida recobra un pulso más vital, menos aletargado. Adoro el contacto de la brisa al pasear, ver cómo mece el trigo, cómo asoman las margaritas silvestres y las amapolas.


Disfruto mucho caminando por los campos floridos. Lástima que en un mes el campo recobre su aridez y el sol domine implacable los parajes manchegos.

1 comentario:

  1. Qué nostalgia!!! me acuerdo tan bien de esos manchones rojos del campo mostrando todo su esplendor!!
    Que suerte tener esos paisajes para deleitar el espíritu.

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